Hoy quisiera llorar,
Como si estuviera desvestido, desencajado
Sonar como trueno, deshacerme en medio de un relámpago
Ser torturado por los cuentos de Oscar Wilde
O tal vez quisiera ser el pirata de una botella de ron barato,
Invitando a caer conmigo a los jóvenes que juntaron sus monedas
En el oficio de la última cena, de la última copa
Hoy quisiera estar, no perderme como de costumbre
Hoy quisiera llorar, traer un lirio muerto entre las manos,
Hoy quisiera detonar los puentes sobre este abismo,
Desmoronar las buenas intensiones
Planear sobre un océano recién descubierto, y morir ahogado por culpa de las aves
Siempre intrusas.
Hoy quisiera repartirme entre abrazos de princesas, encerradas
en torres de piedra, cansadas de masturbarse soñando con sapos mágicos.
Hoy quisiera desterrarme al polo de los inválidos,
Encontrar un motivo a tanta tristeza desesperanzada
O tal vez debería ser un rock star,
Y sonar en una orgía de ruidos desdentados,
Romper las guitarras, como el ciclón de los fascistas
Desear entre amantes vacías la necesidad de una vagina de plástico.
Hoy quisiera llorar, como después de la Vida es Bella,
Sentirme un piano tocado por Fito pero borracho,
Ser la tela en que Frida descuartizo su más hondo descalabro
Y si crees que delirio, amado lector
Sal afuera, por ahí por Palestina, por ahí por Bangladesh
Sal afuera, por una fabella destartalada,
Ve como votaron el portal de los sueños en Carmen 340
Yo te espero, a tres cuadras de del infierno,
El viaje de vuelta,
Que lo pague Dios, si es que aun tiene ganas.
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